Recortes en educación

  En educación a lo largo de este casi medio siglo que he vivido me ha tocado estar cómo alumna en el colegio y universidad y cómo profesora en Formación Profesional.

 Cómo alumna, creo que el menor número de alumnos que hemos estado en una clase en el colegio era de 32 alumnos. 
 Eran colegios privados en su mayoría, nuestros padres tenían que pagar mensualmente el colegio de los niños, era lo normal en la clase media. También había escuelas.  Tus padres elegían colegio y lo pagaban o podías ir a la escuela. Había muchas menos escuelas que colegios.

 Después, la Universidad. En mi comunidad había pocos estudios que se pudieran realizar en la universidad pública: carreras medias, 2 ó 3. Si tenías muy claro lo que querías estudiar era muy probable que tuvieras que ir a vivir fuera de tu comunidad mientras realizabas tus estudios. No sólo tenías que pagar la matrícula, sino el alojamiento, viajes... Había que planteárselo muy seriamente.

 He estado durante bastante tiempo trabajando como profesora en Formación Profesional.
 He trabajado con contratos, no he sido funcionaria. Entre otras cosas porque conforme iba preparándome una oposición iban cambiando las leyes, y después de pasar meses e incluso pagar cursos y temarios, llegaba la convocatoria y los legisladores del momento habían cambiado las leyes y los requisitos en cuanto a titulación para poder presentarse a esas oposiciones , yo no los cumplía en ese momento. Me ha ocurrido tres veces. Perder el tiempo y el dinero.

  Puedo afirmar de forma contundente y con amargura, que el año más llevadero de todos los años que he trabajado como profesora ha sido el año en que no estaba preparada la plaza para alguien contratado sino para una funcionaria. Ella había empezado el curso y hubo que sustituirla por una baja médica. Fue coser y cantar. ¡Qué horario! ¡Qué clases tan llevaderas! Incluso para alguien que todavía no había impartido ese tipo de asignaturas.

  Cuando han sido plazas preparadas para personal contratado ha habido años que han sido un auténtico infierno. Los horarios, la forma en que te indicaban los funcionarios como debías impartirla. El poco material que te suministraban... Prepotencia, inconvenientes, abuso de poder...

  Ahora se está diciendo, que no todo el mundo tiene porque hacer una carrera universitaria, estoy de acuerdo, pero también es cierto que para aprender según que cosas no hace falta tampoco realizar una formación profesional. Se puede aprender en las empresas y además los aprendizajes se ajustarán mucho mejor a las necesidades de la empresa.

 La Formación Profesional de primer grado, ya que se quitaron las asignaturas comunes al bachillerato, como lengua, matemáticas... con la LOGSE y se dejaron únicamente las asignaturas propias de la rama.. y puesto que es un nivel muy elemental el que se pide a estos alumnos habría que replanteársela.

 Desde mi experiencia diré que es una perdida de tiempo para los alumnos y un "a vivir que son dos días" para los profesores, que no tienen sino que ir a no enseñar nada a dichos alumnos y hacer de colegas supersimpáticos para ellos y total, aunque no aprendan nada para que van a suspenderlos, si lo que tienen que aprender es nada y además aprobándoles, es más fácil que se matriculen más alumnos, porque ya se sabe, que hagas lo que hagas, al final sales con un título.

 Al menos, esta es mi experiencia.  Incluso diré que he visto a un profesor funcionario, con autoridad entre los profesores, pelear para que se aprobasen las prácticas en empresas  a un alumno que no había acudido a la empresa a realizar las prácticas y que incluso había trastocado al resto de trabajadores por hacerles esperar en varias ocasiones para ir juntos en el mismo vehículo a la empresa. No sólo no iba, sino que no permitía a los trabajadores llegar puntuales a trabajar por esperarle a él, que no acudía. Bueno, pues le aprobaron las prácticas en empresa y obtuvo el título.

En este aspecto, a mí tampoco me ha tocado la época del estado del bienestar, ¿Cuando fue? ¿Donde me pilló a mí?

¿Qué bienestar han tenido personas de mi edad que después de estudiar una carrera y no encontrar ningún trabajo a la altura de su preparación, estudiaron otra y todavía no tienen un trabajo estable?

 Ya sé, el bienestar ha sido, para los alumnos que no han dado golpe, se han ido a FP, se les ha aprobado, han trabajado de pintores, por ejemplo, y a corta edad han tenido un buen sueldo.

 También para los que por conocer a fulanito de tal, encontraron una plaza de funcionarios, ajustando la oposición a su perfil, tomaron posesión y que no les tosa nadie ya en su vida.

 Además del poderío de mis compañeros funcionarios, es también insultante la cantidad de dinero que en algunos casos se ha gastado en materiales que ni los propios profesores se molestaban en saber como funcionaban.

 Además de en materiales que , sabiendo que podían favorecer el aprendizaje de los alumnos, no se han puesto a disposición del profesor de turno, si no era funcionario. Si era profesor contratado que se buscara la vida...

 Por lo que he podido vivir, siento que es, en algunos casos, muy justo que los profesores funcionarios impartan más horas lectivas. Además, según que tipo de asignaturas impartan, si llevan impartiendo las mismas asignaturas durante años, no necesitan demasiado tiempo para prepararlas...

No creo que haya mayor problema en aumentar el número de horas lectivas .... Y el que diga lo contrario, en muchos casos es simplemente porque han estado en un no hacer nada, tanto tiempo, que tienen mucha caradura.